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En una serie de testimonios denominados “Almas e historias”, varios creyentes de origen musulmán en Jesucristo comparten sus poderosas historias de cómo Cristo se dio a conocer a ellos.
Allí, explican la forma sobrenatural en la que podrían encontrar esperanza y salvación después de pasar años viviendo en la constante condena del Islam.
Aisha es una de esas mujeres que vivieron con dolor siendo musulmanas pero encontraron esperanza en Cristo después de una experiencia supernutal.
Criada en una estricta familia islámica en Amman, Jordania, Aisha tuvo que enfrentarse a situaciones terribles que la llevaron a buscar la paz para su alma. Pero no lo encontró en el Islam, solo recibió la condena.
Cuando Aisha y su familia se mudaron a los Estados Unidos, la situación empeoró después de que en su desesperada búsqueda por llenar el vacío de su corazón, se dispuso a encontrar el amor a su manera y quedó embarazada a los 17 años.
En la cultura islámica, quedar embarazada como lo hizo Aisha es un acto que deshonra a una familia, y sabía que su padre estaba obligado a matarla por deshonrar a su familia. Y de forma desesperada para evitar que le pasara esto, decidió abortar, lo que se convirtió en un tormento para ella durante muchos años.
Con las enseñanzas que había recibido en el Islam que decían que “sus pecados eran imperdonables” y que era “odiada por Allah”, solo podía ver dolor, sufrimiento y depresión en su vida hasta el punto de tener pensamientos suicidas.
Pero un día marcó la diferencia en su vida porque cuando en su búsqueda desesperada por la paz, clamó a Alá pidiendo misericordia, pero escuchó una voz audible que decía una palabra: «Jesús».
A partir de ese momento, Aisha comenzó a decir sus oraciones a Jesús pidiéndole que se revelara a ella y «Esa fue la primera vez que sentí una sensación de paz, fue cuando oré a Jesús», ella afirma.
Quería saber más y en Romanos 5: 8 encontró la verdad y el perdón que necesitaba.
Fue en ese momento cuando Aisha descubrió que Jesucristo era el que ella necesitaba, al darse cuenta de que estaba lleno de misericordia y compasión por las mujeres, incluida ella. Esta asombrosa verdad jugó un papel importante en su decisión de seguir a Cristo.
“Viste a Jesús caminar hacia las mujeres con un elemento de ternura, y ya sabes, la mujer del pozo, la mujer que tenía un trastorno hemorrágico, Jesús la llamó ‘hija’, y eso fue enorme para mí leerlo porque en el Islam a las mujeres no se les considera muy bien «, Aisha dice.
Ella señala que bajo el Islam tuvo que rogarle a Alá por misericordia sin sentir que alguna vez la recibiría, pero descubrió que Jesús es verdaderamente misericordioso. «En todas las Escrituras se ve a Jesús gravitar hacia los pecadores y los marginados». ella dice. «Fue realmente interesante ver la ternura que Jesús tenía hacia los pecadores y los marginados, mientras que en el Islam habría vergüenza, condenación y muerte literal en ciertas situaciones».
Años más tarde, el padre de Aisha se estaba muriendo de alcoholismo cuando ella se sintió obligada por el Espíritu Santo a llamarlo.
Los musulmanes de todo el mundo se encuentran con Jesús. Sintonice del 8 al 12 de mayo a las 6 p.m. en el canal de YouTube de CBN News para escuchar sus historias milagrosas. pic.twitter.com/Xe5UEA4sS3
– CBN News (@CBNNews) 7 de mayo de 2021
Fuente: Faithwire
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